En la Costa de Gerona, tan amplia como diversa, nos encontramos con Lloret de Mar, ciudad con una larga tradición turística, histórica y cultural. Este municipio alberga playas de excelente calidad (con bandera azul), con todos los servicios a disposición del bañista. Sin duda, un destino ideal para la diversión, el descanso y el disfrute del mar.

Además, el visitante podrá descubrir diversos lugares de interés, como los poblados íberos, los jardines de Santa Clotilde o algunos de los restos romanos de la ciudad y de municipios próximos, entre otras actividades.

Los griegos y romanos utilizaban su situación estratégica como puerto de escala en las rutas comerciales del litoral mediterráneo. De ello quedan importantes vestigios. Castigada por piratas y corsarios, fue fortificada con el Castillo de Sant Joan, de imprescindible visita. En el s. XVIII un gran contingente de sus habitantes fueron a hacer las américas, dando lugar a las famosas havaneres, canciones que evocan la nostalgia de su marcha. Con la llegada del turismo, sobre todo francés, ya en el siglo XX, la costa de Gerona se transformó en un lugar ideal para las vacaciones, porque combina perfectamente historia, cultura, tradición y modernidad.

En la costa de Gerona, el visitante encontrará en la gastronomía uno de sus principales alicientes. Las 'sardinadas', 'costelladas', 'arrozadas' (tanto de carnes y setas como de pescados), estofados, las graelladas o las 'olles', junto con otras delicadezas, como el amplio surtido de embutidos o los atrevidos caracoles (a la gormanda, en samfaina, etc.) invitan al turista a sumergirse en la misma historia de la población a través del paladar. En la repostería, destacan las cocas, la crema catalana, los brazos de gitano o los famosos torteles. Evidentemente, cualquier comida debe acompañarse de uno de los excelentes vinos catalanes o del cava más exquisito.

A tan sólo 45 minutos, el visitante podrá llegar hasta Barcelona y contemplar la Sagrada Familia, el Pueblo Español, la Catedral, las Ramblas y el Barrio Gótico.

Junto a la capital catalana, se encuentra el Monasterio de Montserrat, donde está la patrona de Cataluña, la Virgen de Montserrat, 'La Moreneta', y el coro de niños cantores de la Escolania. En Tordera destaca el mercadillo y el espectáculo medieval con su torneo de caballos.

En la propia Gerona, podremos observar la sobriedad de su Catedral, el Barrio Judío, el Lago de Banyoles y el pueblo medieval de Besalú. Ya en los Pirineos, es imprescindible visitar la Vall de Nuria, con su espectacular monasterio en medio del valle, no sin antes pasar por el fabuloso monasterio de Santa Maria de Ripoll.